El danés aseguró que fue condenado únicamente por ejercer la libertad de culto, derecho consagrado en el artículo 28 de la Constitución de Rusia.
El tribunal de la región rusa de Oriol confirmó hoy la pena de 6 años de prisión al ciudadano danés Dennis Christensen, seguidor de Testigos de Jehová, culto prohibido en Rusia en 2017, informó la emisora Radio Svoboda.
El danés, de 46 años, de los cuales 20 con residencia en Rusia, fue condenado en febrero de ese año tras ser declarado culpable de extremismo por ser miembro de activo de Testigos de Jehová, y el tribunal regional desestimó este jueves la apelación presentada por su defensa.
«Aquellos que saben qué ocurre con los testigos de Jehová en Rusia deben sentir vergüenza por su país. En el siglo XXI en un Estado de derecho son inadmisibles las acusaciones y delaciones falsas, así como las torturas», declaró Christensen en su último alegato antes de que tribunal rechazara la apelación.
La defensa de Christensen anunció que recurrirá la decisión del tribunal regional en instancias judiciales superiores.
«La decisión de las autoridades rusas de dejar en vigor esta condena es un atentado contra el derecho a la libertad de culto y de reunión», denunció la investigadora de Amnistía Internacional (AI) para Rusia Natalia Prilútskaya.
En un comunicado de AI, Prilútskaya advirtió de que la decisión judicial adoptada este jueves es «una señal para las decenas de testigos de Jehová perseguidos en Rusia de que las represiones continuarán y de que lo peor aún está por venir».
Según Amnistía Internacional, la decisión de Rusia de considerar Testigos de Jehová como organización extremista es una grave violación a la libertad de culto, que ha desatado persecuciones judiciales en todo el país.
De conformidad con los datos de AI, en el país se han abierto 74 causas penales contra testigos de Jehová, con un total de 188 imputados.
En cumplimiento al capítulo 11 de Daniel «el rey del norte» está imponiendo su poder contra el pueblo De Dios. Pronto se dará cuenta contra quien en realidad está luchando. Oremos por nuestros hermanos perseguidos.